Publicidad, publicidad y más publicidad. Estamos rodeados continuamente y la mayoría de las veces ni siquiera nos damos cuenta. Todo este tema de los avances tecnológicos y del Internet me parece estupendo, cada día podemos disponer más fácilmente de cualquier información y además las comunicaciones cada vez son más sólidas. Sin embargo, todo ello acarrea consigo a la publicidad y el marketing.
No todo es tan bonito como parece: las webs se mueven más que nada por las subvenciones gracias a la publicidad de las grandes empresas. Google por ejemplo. No es casualidad que encontremos determinadas páginas en los primeros puestos de resultados. Detrás de ello, hay dinero. Este hecho me sorprendió bastante cuando se comentó en una clase de la semana pasada y creo que tiene bastante relación con el marketing viral. Estamos continuamente bombardeados por este tipo de juego de mercado: una gran empresa comienza un mensaje en cadena y prácticamente le llega a todo el mundo. Sí, es verdad, nos machacan pero, lo peor de todo es que la mayoría de las veces apenas somos conscientes de ello. ¡Ojo avizor amigos!
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